Aranxa Solleiro
Zinacantepec fue elemental durante el movimiento independentista de 1810, encabezado por Miguel Hidalgo; el municipio también es rico en cultura por la belleza arquitectónica colonial que alberga; sin embargo, la violencia y la inseguridad le arrebataron la magia y, según sus habitantes, se ha convertido en una zona de terror.
Elena García, habitante de Zinacantepec, describe los horrores padecidos por la comunidad, mismos que no han sido combatidos por las autoridades que, a su consideración, evaden abiertamente los llamados de auxilio de los pobladores.
“El año pasado supe de más de cinco muchachas que fueron violentadas por sus parejas y ninguna de ellas tuvo una respuesta a sus denuncias y también, se dice poco pero a cada rato hay balaceras, se junta gente de Cacalomacan, San Juan (de las Huertas), San Luis y hasta ya de la parte del Nevado, que pelean y terminan llevándose a varios por sus intereses”, mencionó.
Con base en lo dicho por ella, el Reporte sobre Incidencia Delictiva del Estado de México en el primer trimestre de 2021, la tasa de homicidios dolosos es de 7.33 por ciento, con 16 carpetas de investigación, 28 casos de extorsión, 315 robos a personas, 71 a casas habitación, así como 24 robos a negocios, además del registro de 11 casos relacionados a violaciones.
“La verdad cada día se percibe más gente de fuera, la misma que puede provocar que la delincuencia se desate, no por echarles la culpa, sino porque ya llegan por otras razones y al estar cerca del Volcán (Xinantecatl), varios se pelean por los terrenos, todo esto nadie lo comunica y se cree que vivimos en la gloria”, mencionó Javier, residente de más de 25 años en el anterior Pueblo con Encanto.
Aunado a lo anterior, la población zinacantepequense ha percibido mayor migración de parte de residente con más de 20 años en el lugar, precisando que la identidad de la comunidad se ha visto perpetrada.
“Es triste que mucha gente que lleva toda su vida viviendo aquí tenga que buscar otro lugar para vivir. ¿Dónde está todo el cobijo que nos da supuestamente el gobierno?”, argumentó Abel Zarza, residente.
En cuanto al turismo, los locatarios lo habían considerado como una creciente fuente de ingresos, especialmente por la riqueza histórica desde la época virreinal, sin embargo, la inseguridad ha impedido obtener éxito en ello.
“Pasamos de ser un sitio común a uno con nombramiento de Pueblo con Encanto, que era casi como a estar a un paso de ser Pueblo Mágico, pero con los cambios de gobierno y la inseguridad que va peor, todo lo bueno que podíamos alcanzar, se está terminando”, compartió Zarza.
De tal manera, los residentes urgen por un control y atención de sus demandas, particularmente para vivir rodeados mayoritariamente por un ambiente pacifico.
(Foto: Aranxa Solleiro)
