Aranxa Solleiro  

Con hilo, piel y alambre, las pinzas unen con fuerza y pasión la creación de piedras infestas de minerales que conforman un collar, una pulsera o aretes de brillos espectaculares. Lluvia Maldonado, explica con ingenio, los colores fluorescentes que emana la piedra labradorita, nombrada así, por evocar la imagen de la mariposa labradora al momento de expandir sus alas ante el sol.  

Desde hace más de 17 años, Lluvia es apasionada de la artesanía, siendo como principal sustento su taller artesanal “Neandart”, el cual creó junto con su esposo, quien también es amante de las piedras preciosas, mejor conocidas como cuarzos.  

“Mi papá era guía de turistas, cuando era pequeña me llevaba a sus viajes y me daba cuenta de lo que se vendía, me empezó a llamar la atención cómo se veían los cuarzos, desde entonces, cada que él podía, me llevaba una piedra o una pulsera y así fue como nació mi amor por esto.” Explicaba entre alambres telefónicos, cuyas uniones son creadoras de fascinantes pulseras repletas de colores de arcoíris.  

Ella, forma parte del Fomento Artesanal de Toluca, siendo antes de la pandemia, la Plaza González Arratia el lugar donde vendía junto con demás artesanos, no obstante, por razones de seguridad sanitaria, tuvieron que ser negados a sus ventas, hasta que en noviembre del año pasado, se dio apertura al andador artesanal en la Terminal, aprovechando la dicha de poder regresar al amor de la creación. 

“Cuando empezó la pandemia desde marzo, nos cerraron la Plaza a nosotros los artesanos, entonces yo tuve que dedicarme a otro trabajo para poder solventar gastos, porque a esto me dedicaba de lleno. Cuando empezó a bajar más o menos el contagio, nos invitaron a estar aquí y me vine, pero la verdad es que la mayoría de la gente no se acerca. Pasan pasajeros, claro, pero no todos tienen la paciencia para detenerse y preguntar si les gusta algo, uno va trabajando ya con clientes que tenía o de repente con quien se interesa y te da encargos, pero como tal, gente externa, no llega. Siento que también es por la zona, porque la verdad la Terminal es un espacio inseguro para muchos.” Argumentó. 

Desde su inauguración en 1972, la terminal de Toluca alberga 12 carriles con aproximadamente 10 andenes cada uno, dentro de los cuales descienden cientos de pasajeros cada día. El espacio de conexión entre pasajeros, no solo se enfoca en los abordajes, sino en el sustento de vendedores que, desde aquel primer día de su funcionamiento, han dedicado sus horas cotidianas a ofrecer sus productos. 

No obstante ello, la zona en la que se ubica, es considerada como una de alta tasa delictiva, de acuerdo a trabajadores de transporte de la zona, argumentaron en entrevista que al menos se escucha de un robo al día, especialmente en autobuses que convergen en el sitio, perpetrando con ello, el entusiasmo de artesanos establecidos. 

Maldonado, expresa que no todos sus compañeros han decidido colocarse en los espacios que aún se encuentran vacíos en el andador, esto debido no solo a la problemática del virus, sino a la falta de seguridad en la zona, en tanto que al menos en dos ocasiones los artesanos, han sufrido de robos hormiga. 

“No todos mis compañeros que estaban en la Plaza, han querido venir aquí, porque todavía no se sienten seguros por lo del virus y también porque se han dado robos ya, ninguno ha sido grave o violento, pero no tenemos la seguridad que quisiéramos.” Dijo. 

A pesar de ello, Luna abre su local todos los días de 10 de la mañana a 5 de la tarde, para explicar con vocación la divinidad de las piedras fósiles y las piedras de luna, las cuales menciona, captan la atención de los clientes porque los minerales de la piedra y los del cuerpo, se conectan.  

“Cuando una de las piedras te llama la atención, se debe a la carga de minerales que tanto tú como ella tienen en el interior, eso hace que te capte y después es difícil que la sueltes o quieras fijarte en otra, porque no tendrá la misma carga de energía contigo.” Compartió. 

Una de las sugerencias de Maldonado, se centra en pedir mayor difusión al andador, ya que ni autoridades del ayuntamiento ni la Secretaría de Turismo del Estado de México, se han acercado para ofrecer promoción que asegure mayor ganancia a los vendedores. 

“Estaría muy bien que nos den más promoción con espectaculares en partes de la ciudad o también en el tranvía que siempre da recorridos alrededor de Toluca, podrían considerar venir a nosotros y podemos explicarles a los del tour la elaboración de nuestros productos y el tipo de material que tenemos. Tener una comunicación con el visitante y el artesano siempre es especial.” Dijo. 

Mientras tanto, Lluvia ofrece sus artesanías a través de Facebook con el nombre del taller antes mencionado, red social a través de la cual, ha podido sustentarse generando pedidos especiales y adoptándolo como un espacio promocional. 

(Foto: Aranxa Solleiro)