A través de su portal oficial la Organización Mundial del Turismo (OMT) ha designado el 2020 como el “Año del Turismo y el Desarrollo Rural”. Este año se han implementado estrategias para fomentar el potencial del turismo con la generación de empleos y oportunidades. Asimismo, permitirá favorecer la inclusión y destacar el papel sin par que podría asumir el sector en la preservación y promoción del patrimonio natural y cultural y en la desaceleración de la migración urbana.
Aranxa Albarrán
El Día Mundial del Turismo de este año compartirá ese mismo lema. El cual es celebrado todos los años el 27 de septiembre, teniendo por objeto concienciar a la comunidad internacional respecto del valor social, cultural, político y económico del turismo, así como de la contribución que el sector puede aportar al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. El año 2020 marca el 40̊ aniversario del primer Día Mundial del Turismo.
Después de la crisis ocasionada mundialmente por la pandemia, la OMT asegura que nunca el turismo y el desarrollo rural han revestido tanta importancia como ahora. El turismo en zonas rurales ofrece importantes oportunidades de recuperación, por lo que es fundamental apoyar a las comunidades rurales que padecen las repercusiones económicas y sociales de la pandemia.
Dicho lo anterior es prudente enfatizar en los beneficios del turismo para las comunidades rurales:
En todo el mundo, las comunidades rurales con una importancia turística en el mundo, se han visto afectadas por la pandemia. Se perdieron empleos y las restricciones a los viajes frenaron las actividades turísticas, lo que puso en riesgo a las pequeñas empresas. Esto conllevó al crecimiento de dificultades en las zonas rurales a causa del envejecimiento de la población, la reducción de las actividades económicas tradicionales y la despoblación.
En diversas ocasiones, los beneficios del turismo, incluidos el crecimiento económico y las mejores oportunidades de empleo, se concentran en las zonas urbanas, sobre todo en las ciudades. Las nuevas tecnologías, la innovación, el espíritu empresarial y el interés creciente de los viajeros por experiencias relacionadas con los lugares que visitan, así como mayor conectividad, abren nuevas ventanas de oportunidad para el turismo en las zonas rurales.
El aprovechamiento del poder del sector turístico para impulsar el desarrollo rural mejorará la contribución del sector al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible creados por la OMT, en particular al Objetivo 1 (fin de la pobreza), el 5 (igualdad de género), el 8 (trabajo decente y crecimiento económico), el 11 (ciudades y comunidades sostenibles), el 12 (consumo y producción responsables) y el 17 (alianza para el logro de los objetivos).
Por tal motivo, la crisis derivada del COVID-19 brinda la oportunidad de llevar a cabo una reconstrucción, con mejores inversiones en modelos centrados en el fomento de la autonomía y la participación de las comunidades locales, la inclusión y la preservación de los recursos naturales y culturales locales.
