Martha Romero/Ana María López
“Algo no cuadra aquí”, hace notar Carlos García Álvarez, vicepresidente nacional de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas (Amotac). Se refiere a los datos que aseguran una reducción de 15% de los robos a transporte de carga en 2023. “Desafortunadamente —precisa— lo que se ve en las calles y lo que se ha vivido no coincide con los números”.
Recuerda incidentes graves sucedidos recientemente, como el homicidio del conductor de un tráiler, baleado por resistirse a un asalto, en enero de este año, en Cuautitlán Izcalli, y el asesinato de un joven por grabar el intento de robo del vehículo en el que viajaba con su padre en la autopista México-Pachuca, a principios de julio pasado. “Para todos los transportistas, el índice y el temperamento de los delincuentes va subiendo, porque actualmente cuestan decesos humanos”.
Hablan los hechos
La parte más difícil en lo que a robos al transporte de carga corresponde, es el Valle de México, señala: el Circuito Exterior Mexiquense, aunque dicen que ahí no pasa nada, pero los robos siguen; el Arco Norte, la México-Querétaro, son carreteas en las que continúan los asaltos.
En el Valle de Toluca se han dado algunos robos del lado de la Central de Abastos y el boulevard Aeropuerto, en Toluca, y en Xonacatlán, aunque no con los mismas cifras que se registran en el Valle de México.
“A eso me refería al decir que algo no está cuadrando; de acuerdo con los números, el estado de México ocupa el primer lugar en este delito, lo dice toda la información de las fiscalías, denuncias y hechos que suceden con el día a día”, resalta.
Efectivamente, cualquier fuente consultada coincide con lo dicho por García Álvarez: las carreteras del centro del país son las más peligrosas para los transportistas, en concreto, las del estado de México.
El pasado 10 de julio, el mismo día en que fue asesinado el joven en la México-Pachuca, el Pleno de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión aprobó un dictamen para exhortar a las secretarías de Seguridad y Protección Ciudadana; de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, y de Turismo a fortalecer los programas de inteligencia que permitan combatir al crimen organizado en las carreteras del país.
El documento señala que, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de 2022 a 2023 el robo a autotransporte se incrementó más del 4%, ya que se denunciaron 13 mil 848 atracos, tanto en el fuero federal como local, comparados con los 13 mil 220 reportados en 2022.
De los asaltos en autopistas, agrega el dictamen, 86% ocurrieron con violencia y más de la mitad se registraron en los estados de México y Puebla; además, generaron pérdidas anuales por alrededor de 7 mil millones de pesos; los productos más robados fueron alimentos y abarrotes.
Las y los legisladores resaltaron en el exhorto que esta situación no solo genera violencia y pérdidas humanas, sino que incide en notables pérdidas económicas, y cita cifras de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin), la cual estima que en 2022 las pérdidas ocasionadas por el robo al autotransporte alcanzaron casi 7 mil millones de pesos.
El costo de la violencia
Por otro lado, una investigación del Programa de Seguridad Ciudadana de la Universidad Iberoamericana CDMX, titulada “El robo a autotransporte de carga desangra a México”, cuyo autor es Emiliano Hernández, estudiante de Relaciones Internacionales, indica que la Cámara de la Industria de Transformación de Nuevo León (CAINTRA) encontró que “el total de costos asociados al robo de mercancía en autotransporte fue de 9 mil 545 millones de pesos en 2022, lo cual representó un incremento del 64% al año previo. Este costo considera el valor de la mercancía y también costos adicionales como el pago de seguros y/o aumento de prima, daños o pérdidas de las unidades de transporte, costos por incumplimiento de pedido, violencia contra choferes y otros”.
Agrega que “es importante recalcar que el costo que representa la violencia contra los choferes aumentó de 23 millones de pesos en 2021 a 101 millones de pesos en 2023. De acuerdo con el presidente de la Federación Mexicoamericana de Transportistas (Fematrac), entre 2018 y 2022 se suman más de 100 operadores de autotransporte asesinados. Y a mediados del 2023, se estimaban alrededor de 39 operadores asesinados, aunque 20 confirmados por la Amotac”.
“Como consecuencia —continúa el documento— esto se ha materializado en un déficit de trabajadores en el sector que ya no quieren operar los camiones en territorio mexicano: el déficit se contabiliza en alrededor de 600 mil, de acuerdo con David Estévez, presidente de la Asociación Nacional de Transportistas”.
Sobre la cantidad de robos registrados, Emiliano Hernández muestra datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP): “El robo a transportistas aumentó menos del 1% entre 2021 y 2022 a nivel nacional. Sin embargo, de enero a septiembre de 2023, el robo a transportista aumentó más del 10.3%”.
Dice además que más del 90% de los delitos se cometen en 10 entidades: estado de México, Puebla, Guanajuato, Jalisco, San Luis Potosí, Michoacán, Querétaro, Hidalgo, Veracruz y Tlaxcala. “Destacan el estado de México con más del 30% de las denuncias de robo y Puebla, con casi el 20% de las denuncias”.
39 hurtos al día
En tanto, la empresa SafeLink, especializada en reducción y prevención de riesgos logísticos, publicó en septiembre de 2023 que de acuerdo con el Instituto Mexicano del Transporte, durante 2022 aproximadamente el 85% de las mercancías se trasladaron a través de carreteras, por lo que la situación de inseguridad en el transporte de carga resulta altamente preocupante para la economía nacional.
Estima además, con datos del Centro de Inteligencia de la empresa Overhaul, que durante el primer trimestre del 2023 “se cometieron 39 hurtos al día, es decir, 1.6 cada hora; de este total, la Fiscalía General de la República solamente abrió mil 123 carpetas de investigación”.
Expone que “la región centro del país concentró la mayor cantidad de robos de carga, con 62% del total, seguida por la región oeste, con 25% de los incidentes. Por porcentaje de acontecimientos, las diez entidades con más robos registrados fueron el estado de México (35%), Puebla (18%), Guanajuato (9%), Jalisco (8%), San Luis Potosí (5%), Michoacán (4%), Veracruz (4%), Querétaro (3%), Hidalgo (2%) y Tlaxcala (2%)”.
En un documento anterior, SafeLink enumera las carreteras con más robos al transporte de carga. Los tramos que corresponden al estado de México son: avenida Gustavo Baz Prada-El Mirador-Puente de Vigas; boulevard Manuel Ávila Camacho, en el entronque con la carretera Lechería-Chamapa; entronque Circuito Exterior Mexiquense, San Isidro; avenida Paseos del Bosque; colonia Industrial Cuamatla (los tres en Cuautitlán Izcalli); tramo Tepotzotlán-Palmillas, del km 51 al 53 y pasando la caseta de Jorobas desde el km 58; tramo San Miguel Teotongo (CDMX)-San Marcos Huixtoco (estado de México), México-Puebla, del km 24 al km 39; autopista México-Pachuca (de Santa Clara a Santa María Tulpetlac, en Ecatepec), y pasando la Caseta Ojo de Agua (de la zona Los Héroes Tecámac, del km 29 al km 38 Isidro Fabela).
En resumen, la agencia de seguros considera que “el estado de México es una ‘guarida de lobo’ para todos aquellos que transportan mercancía”.
Miedo a denunciar
A propósito de lo que sucede en las carreteras mexiquenses, el vicepresidente nacional de Amotac, Carlos García Álvarez, señala en entrevista con Acta Semanal que las mercancías más robadas son los abarrotes, como cereales y papel higiénico, entre otros productos; un camión con esa carga tiene un valor de 400 a 600 mil pesos. En el caso de otros alimentos, como sopas, aceite o azúcar, el costo puede superar el millón de pesos.
Añade que en lo que va del 2024, cada mes han sido robados de 20 a 30 camiones, y subraya que las mercancías hurtadas se venden en mercados y “pulgas” a menores precios que los que tienen en centros comerciales o supermercados. También es común encontrar esos artículos baratos en mercados municipales de la entidad.
Por otro lado, este año han levantado alrededor de 300 denuncias, pero hay quienes no se atreven a denunciar porque tienen miedo de las represalias de las que puedan ser objeto, además de que se enfrentan a la burocracia y a la corrupción.
García Álvarez menciona que tienen comunicación estrecha con la Dirección General de Combate al Robo de Vehículos y Transporte de la Secretaría de Seguridad estatal, mediante un chat con el titular, porque en el número de emergencias 911, la llamada o no entra o tarda en entrar, además de que impera la burocracia y se pierde tiempo valioso, lo que permite que el delincuente se dé a la fuga.
Explica además que de cada 10 camiones completos robados con carga, llegan a recuperar seis. De un tractocamión a veces recuperan el tracto pero el remolque no, ni la carga, aunque algunas veces no recuperan nada: ni el tractocamión ni el remolque ni la mercancía. En algunas ocasiones los delincuentes desmantelan los tractocamiones y los venden por partes.
Sobre los decesos de conductores, comenta que entre sus agremiados no se ha registrado ninguno, solo un chofer resultó herido por un rozón de bala. Relata que en ocasiones los bajan del camión, los meten a la cajuela de algún automóvil o camioneta y se los llevan para dejarlos en parajes solitarios, les quitan celular y dinero, para dejarlos incomunicados. En el peor escenario, a veces los secuestran por cuatro, cinco o seis horas, pues la forma de operar de cada grupo delictivo en variable.
Lo que esta organización recomienda a sus agremiados es no detenerse en parajes solitarios y no resistirse al asalto, pues primero están sus vidas.
Voto de confianza
Carlos García Álvarez espera que el nuevo Secretario de Seguridad del Estado de México, Cristóbal Castañeda Camarillo, con quien han tenido ya varias reuniones, dé resultados para el sector, y dice que los transportista están dispuestos a coadyuvar.
“Recordemos que hoy, con la tecnología, al instante podemos detectar un robo, porque la mayoría de los camiones trae un localizador satelital, y cuando uno solo deja de dar señal o posicionar, algo no está bien, y si nosotros denunciamos y no hay una reacción, pareciera que o están de acuerdo o no tiene interés o definitivamente algo hace falta”, expuso.
Indicó que en las reuniones con el funcionario les han dicho de que van a invertir en patrullas y a arreglar las que tienen dañadas, y recalca que la tecnología debe ser utilizada para resolver al momento.
Resalta que los transportistas le dan un voto de confianza a las autoridades encargadas de brindar seguridad, “porque no se pueden pelear con quien debe ejercer la acción de dar seguridad a la ciudadanía en general”. Lo que les da confianza es la proximidad que han tenido con el secretario de Seguridad, porque los ha escuchado y se ha reunido con ellos, un gesto que los otros secretarios no han tenido.
“Creo que sí somos más los ciudadanos buenos que los malos. Esto es cuestión de entendimiento, proximidad y vinculación, es lo que da resultados; si funciona, nosotros también se los haremos saber, porque no somos cómplices, y quien omite también es cómplice. Si decimos que algo está mal, está mal”, concluyó.
Fotos: Especial Acta Semanal.
Sección: Sociedad |
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