De acuerdo con datos de la Asociación de Bares y Restaurantes (ASBAR) del Estado de México, la derrama económica generada en la entidad por los festejos del Día de la Madre, este fin de semana, apenas llegaron 150 millones de pesos como derrama económica frente a los mil millones generados en 2019, como muestra fehaciente del impacto que está teniendo la pandemia por covid19.
Miguel García Conejo
Patricio González, presidente del organismo empresarial, señaló que esto representa una promedio global de aumento del 15 por ciento; esto cuando únicamente el 35 por ciento de los establecimientos dedicados a la venta de alimentos y bebidas sigue abierto toda vez que muchos empresarios han optado por cerrar por no ser costeable la venta a domicilio.
“El otro 65 por ciento que están cerrados, unos han tenido que cerrar por ser considerados actividades no esenciales, como pudieran ser bares, discotecas cervecerías, salones de baile y otro tanto han cerrado por no ser conveniente seguir trabajando de con esta modalidad de a domicilio, no es costeable vender a domicilio cuando tenemos que solventar los gastos de tener el negocio abierto”
Entre aquellos que mantuvieron su actividad, destacó que algunos establecimientos lograron vender hasta el 50 por ciento de su venta del año anterior superando sus expectativas.
“No es una mala venta. Gracias a los pedidos de todos ustedes, estos negocios pudieron tener esa derrama económica y por supuesto ayudar a muchos empleados que dependen de esos negocios. Desgraciadamente, haciendo un promedio global entre los negocios que están cerrados y aquellos abiertos que pudieron vender hasta ese 50 por ciento; llegamos a esas cifra de solamente alcanzar el 15 por ciento de derrama económica que hubiéramos captado como sector si no hubiera contingencia sanitaria”-
Los sectores que por tradición y comodidad concentraron la venta a domicilio, fue de la comida tradicional mexicana, pozole, tacos y cortes de carne y la denominada Fast Food. Empresarios del sector llamaron a las familias a privilegiar el consumo local de su barrio o colonia para que los pequeños negocios logren sobrevivir.
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