Ivan Joatzay
Dante Álvarez, Jazmín Cristino y Jesús Pichardo, integrantes y activistas de la asociación civil ‘EcoRenacimiento’ y el colectivo ‘Soñemos Toluca’, entregaron a la Secretaría de Movilidad del Estado de México, y presentaron ante medios de comunicación su proyecto: ‘Pacificación de intersecciones viales estatales de Toluca’ dónde, en un lapso de aproximadamente un año, analizaron los “puntos rojos” de conexión entre vialidades de la capital mexiquense que, afirman, concentran la mayoría de los accidentes, lesiones, colisiones, atropellamientos y decesos.
“Lo que tenemos es un gran rezago de la construcción de las vialidades aquí en Toluca, que se construyeron con criterios carreteros, esto para facilitar el flujo de vehículos. Al implementarlo en entornos urbanos, lo que hace es generar víctimas”, explicó Álvarez.
Entre sus investigaciones, los activistas expusieron que, con una incidencia de 7 mil 707 siniestros entre 1999 y 2019, las vialidades de Toluca han registrado el 27% de todos los siniestros del estado. Entre ellas, con una incidencia de 2 mil 931 casos, la intersección de av. Isidro Fabela con la prolongación Toluca-Palmillas se ha coronado como el principal punto de riesgo para transeúntes, ciclistas y automovilistas. Posterior a esta le siguen Paseo Tollocan y av. Solidaridad las Torres con 2 mil 308 y 994 siniestros.
Asimismo, afirmaron que se deben pacificar las vialidades estatales del Valle de Toluca a través de una estrategia de intervención a las intersecciones principales de cruce entre dichas carreteras, a través de la reducción de carriles, colocación de confinamientos y el marcado de señalamientos de orientación vial.
“Lo que nosotros hacemos principalmente es rediseñar estos espacios y ganar seguridad para las personas y reducir altas velocidades (…) primero se hace este levantamiento del espacio, trazar como tal la vía con las dimensiones actuales en las que está; las dimensiones de banqueta, dimensiones de carriles, si existe o no mobiliario, o algún tipo de barrera, posteriormente a esto, se hace una redistribución del espacio para darle la dimensión justa que requieren los carriles, esto basándose en los manuales de infraestructura”, detalló Cristino.
La propuesta, explicaron, se desenvuelve en dos etapas donde, desde un estado emergente hasta uno permanente, se analizaría la incidencia de prevención que tiene la reestructuración del sistema vial para reducir el número de muertes:
“Literalmente, esto es aterrizar lo que dice la ley, lo que dicen los manuales y todo lo que dice esta nueva postura, pero sacarla del discurso y llevarla al espacio público.”
De ser aceptada o implementada la propuesta, se implementaría la colocación de boyas y señalamientos en pintura para generar un hábito de prevención de paso entre los peatones, ciclistas y automovilistas. Posteriormente, en un enfoque permanente, se rediseñaría geométricamente el espacio de cada intersección para ensanchar banquetas, construir rampas, modificar carriles, colocar luminaria, mobiliario e infraestructura verde.
La incidencia de siniestros
De acuerdo con información del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), México se ha posicionado a nivel mundial como el séptimo país, y en Latinoamérica como el tercero, con mayor número de muertes por consecuencia de siniestros viales, esto, registrando diariamente 22 decesos de jóvenes de entre 15 y 29 años. Por su parte, en el Estado de México, informes del INEGI en 2020 han referido que, de los 301 mil 678 siniestros que se contabilizaron en ese año, el Edomex registró 16 mil 940 casos.
(Foto: Ivan Joatzay)
