Vanessa Baez
En este inicio de 2023, los gimnasios del Estado de México perciben una mayor asistencia en sus instalaciones, recibiendo a más del doble de personas de las que reciben usualmente en el transcurso del año. Este fenómeno es considerado por los administradores como parte de la motivación de iniciar un ciclo con objetivos renovados, como bajar de peso.
Las cifras oscilan entre un aproximado de 250 personas de todas las edades inscritas durante los primeros días enero, cuando el resto de los meses se mantiene en un cerca de 100 asistentes.
“Viene gente de todas las edades, sobre todo de entre 25 a 35 años y también varios menores, chavos que quizá por el autoestima quieren venir a dejar su emoción aquí.”
Dicha afluencia corresponde a los propósitos que muchas personas se fijaron a finales de 2022 para hacer ejercicio, bajar de peso, mejorar sus condiciones emocionales y alimenticias o desestresarse del mundo laboral este 2023.
En el caso de Rose Gym, espacio ubicado sobre la vialidad Jesús Reyes Heroles, frente a la Alameda 2000, señalaron que la llegada de nuevos clientes y el regreso de otros tantos que abandonaron la práctica por temporada vacacional se ha visto desde el pasado 2 de enero:
“Muchísima gente se está inscribiendo, está atascado de gente desde el lunes. A las 7 de la noche están atascados los dos pisos y no se puede ni pasar, sí hay bastante gente”, comentó María Zaidé Morales, una de las administradoras del lugar.
Así mismo señaló que durante diciembre, la afluencia disminuyó considerablemente, ya que fechas como Navidad y Año Nuevo o la salida de vacaciones de algunos clientes, ocasiona la deserción temporal:
“En diciembre bajó mucho la asistencia, estaba muy vacío todo, sobre todo en Navidad y Año Nuevo”, dijo.
Una meta que no dura todo el año
María Zaidé también señaló que es usual que esta afluencia presente bajas de los primeros tres a cinco meses del año, ya que muchas personas que no encuentran disciplina ni motivación desertan de las actividades deportivas.
Pero, por otra parte, también hay quienes se mantienen de forma regular durante los 12 meses; tal es el caso de Marco Montes, quien asiste a sus entrenamientos de lunes a viernes con el objetivo de ver cambios en su apariencia física.
“En enero pretendo continuar con el entrenamiento, lo que me motiva es ver cambios en mi cuerpo, ya llevo un año y no lo puedo dejar a pesar de las vacaciones. No quiero perder lo que ya gané. Emocionalmente me desestresa un poco, te olvidas de la carga de trabajo, lo que tienes en casa, los pendientes y tu mente está tranquila y acepta los cambios”, concluyó.
(Foto: Vanessa Baez)
