Martha Romero 

Taxistas de la comunidad de San Francisco Tlalcilalcalpan denunciaron ser víctimas de extorsión, lo que ha generado terror entre el gremio, al grado que los choferes renuncian a su empleo y huyen a otros estados.

Los denunciantes afirmaron que San Francisco Tlalcilalcalpan es un “foco rojo” porque los intentos de extorsión son recurrentes, por lo que solicitaron la intervención de la Guardia Nacional o, de ser necesario, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) o la Marina para frenar estos actos delictivos.

Denunciaron que operadores de al menos 15 bases de taxis de esta comunidad han recibido amenazas de extorsión, solicitándoles cuotas mensuales de 2 mil 800 pesos por vehículo en las bases pequeñas, pero hay bases que tienen más de 50 unidades y la cantidad es más grande. 

Recordaron que las amenazas comenzaron alrededor de febrero del año pasado y el presunto responsable fue asegurado en mayo; sin embargo, logró salir de la cárcel por no ser delito grave y hoy, a la par de estar enfrentando un proceso, está de nuevo delinquiendo.

Indicaron que entre semana son amenazados presuntamente por la integrantes de la Familia Michoacana, mientras que los sábados y domingos las amenazas eran del Cártel Jalisco Nueva Generación; no obstante, terminaron por darse cuenta que realmente el crimen organizado no es, sino son vivales que se aprovechan de la situación.

Finalmente, reiteraron que les están pidiendo cierta cantidad de dinero para dejarlos trabajar, de otra manera los golpean y amenazan con quemar los autos, pues tan solo el año pasado golpearon a varios taxistas y quemaron cuatro unidades, en una de ellas apareció el cuerpo de un chofer que presuntamente se habría negado a pagar a los extorsionadores.

(Foto cortesía)