Ramón Cuevas Martínez

Tres tipos de lenguaje para la vida: el accesible, el incluyente y el no sexista

 “En el lenguaje del Siglo XX, la llegada a la luna fue un gran paso para el hombre, en el lenguaje del Siglo XXI, fue un gran paso para la humanidad”

Ramón Cuevas Martínez

Desmontar estereotipos en el lenguaje cotidiano significa desmontar el Siglo XX, para avanzar, como en todos los aspectos de nuestra vida, con nuevas maneras de comunicarnos. De la misma manera como han evolucionado las telecomunicaciones y las nuevas técnicas para mejorar la salud, LA EVOLUCIÓN DEL LENGUAJE ES EQUIPARABLE A LA EVOLUCIÓN DE NUESTRA CULTURA.

Todos los seres vivos poseen mecanismos de comunicación, en el caso del ser humano, se distingue por transmitir significados complejos a través de un sistema de signos: orales, escritos o gestuales, este sistema de signos se requiere para llegar al objetivo del entendimiento común y lo entendemos como lenguaje.

El lenguaje obedece a un espacio y a un tiempo siempre contemporáneo. Es dinámico, cambiante, y ciertamente es capaz de avivar fuegos de exclusión e intransigencia reforzando injusticias, discriminación y estereotipos, pero también puede contribuir a lograr la igualdad, pues no se trata de una herramienta inerte, acabada, sino de una energía en permanente transformación que evoluciona para responder a las necesidades de la sociedad que lo utiliza.

Sostener que debemos seguir teniendo el mismo lenguaje de hace 100 años, equivale a justificar que nada debe evolucionar, por ejemplo, descalificar la evolución de los primates en personas.

El desarrollo de la humanidad requiere cada vez más entendimiento, sigue un principio de accesibilidad, donde los signos y símbolos usados en el lenguaje sean comprensibles y aceptados para todas y todos a quienes va dirigido el mensaje del emisor.

En un ambiente laboral el lenguaje está dirigido a mejorar la información y comunicación hacia el personal que lo conforma, se requiere una nueva forma de comunicación, más clara, abierta, fluida, concisa y de fácil entendimiento con la finalidad de eliminar cualquier barrera en la comunicación, a esto se le denomina lenguaje accesible. TODO MUNDO DEBE ENTENDER UN MEMORANDUM, NO SOLO QUIEN LO ESCRIBE.

El lenguaje además expresa una compleja trama de dimensiones humanas que van desde lo cotidiano y práctico hasta lo simbólico; abarca sentimientos, mandatos, experiencias y ha sido también fuente de violencia simbólica, una herramienta a través de la cual se ha naturalizado la discriminación y la desigualdad que históricamente ha existido entre mujeres y hombres, que tiene su origen en los roles y estereotipos de género que limitan y encasillan a las personas partiendo de sus diferencias sexuales y biológicas, denominado como lenguaje sexista, el cual específicamente legitima y reproduce relaciones injustas que invisibilizan a las mujeres, prevaleciendo formas de expresión colectiva que las excluyen con formas lingüísticas que subordinan lo femenino a lo masculino. DEBEMOS SER CAPACES DE ESTABLECER EL LENGUAJE NO SEXISTA.

El lenguaje incluyente es un elemento que reconoce a las mujeres y a los hombres tanto en lo hablado como en lo escrito, manifiesta la diversidad social e intenta equilibrar las desigualdades. El lenguaje incluyente contribuye a forjar una sociedad que reconozca e integre la diversidad, la igualdad y la igualdad de género, terminando con la discriminación al utilizar el género masculino de manera neutra, por ejemplo: “en la historia de la humanidad”.

*Consultor en Gobernova         

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