Ivan Joatzay
Comerciantes de la central de abastos reportaron sentirse inseguros en su hábitat laboral. Si bien, la administración presente ha mejorado el control de robo, actualmente la pérdida de bienes, chantaje y acoso a trabajadores prevalece entre las mayores dificultades.
Ante el acto de homicidio culposo suscitado el 10 de junio en la Central de Abastos de Toluca, donde 9 personas, entre ellos 3 menores de edad, murieron calcinadas por un incendio cuyo origen aún se indaga, el equipo de Portal acudió al punto de comercio para conocer el panorama de seguridad en el lugar.
¿Qué problemas existen en la central?
Los comerciantes detallaron que, entre las principales carencias de seguridad, se encuentra elmal manejo de supervisión de ingreso a las instalaciones, escasa iluminación y falta de presencia de la seguridad privada a lo largo de todos los puntos de la central:
“Debe de haber más vigilancia, hay más robos”,expuso una mujer que acude a vender sus platillos de comida todos los días.
Entre otras opiniones, los entrevistados destacaron que “hay más vigilancia”; pero, “hay un ambiente hostil”; y presencia delictiva dentro de las instalaciones. Asimismo, coincidieron en un mismo punto: la ineficacia operativa de la administración actual.
“Necesitamos más presencia, sí pasan a ratos y supervisan, pero parte del problema es qué tanto permites la delincuencia e irregulares en las calles. En la central sí se podrían cubrir más áreas o mantenerse fijos”, declaró un comerciante de mayoreo en la canasta básica.
Más adentro = Más inseguridad
Igualmente destacaron que la inseguridad se concentra con diferente intensidad en puntos específicos. En la zona perimetral de la central existe menor movimiento y mayor control de la seguridad y robos “rapiña”; sin embargo, el robo y consumo de sustancias ilícitas aumenta al interior.
“No [nos sentimos seguros], pero es nuestro trabajo como comerciantes. ¿Qué se puede hacer? En algún momento muchos pasan fumando su marihuana y es incómodo, pero ellos nos han dicho que ya es legal su consumo, ¿no?”
Otro problema, es la violencia de género. Trabajadoras de este espacio declararon que no sólo el acoso prevalece al interior, pues ha habido violaciones sexuales en las instalaciones, principalmente en horarios matutinos, aunque la problemática se ha controlado en temporadas con mayor vigilancia:
“¿Cómo te explico? En la mañana, cuando vienen a abrir las cortinas, un hombre se les acercó sin que lo vieran y les enseñó su parte íntima”, relató la dueña de una fonda ubicada en la zona periférica respecto a los casos que ocasionalmente se presentan.
Respecto a las riñas, aunque no se presentan en todos los sectores de la zona de comercio, vendedores del epicentro de la central expusieron que son comunes entre comerciantes. Asimismo,dueños del sector alimenticio y carnicería suelen ejercer el cobro forzado de deudas:
“Es que luego hay mucha gente que pide las cosas fiadas y nomás no quieren pagar. A la hora que ellos pasan a cobrarles empieza la discordia y hay mucha riña económica y de piso.”
¿Cuál es el panorama de seguridad actual en la Central de Abastos?
Por el momento, en un recorrido de reconocimiento a través de Central, el equipo de Portal se percató de la escasa presencia de elementos de seguridad en el punto de comercio. En un lapso de hora y media, solo se observó una motocicleta del departamento de seguridad con dos elementos a bordo. Al acudir al área administrativa para conocer el sistema de protección al ciudadano, se reportó la ausencia de autoridades administrativas, quienes suspendieron su labor alrededor de las 12 de la tarde, y anunciaron que no regresarían por el resto del día.
(Foto: Ivan Joatzay)
