Martha Romero
Penas de tres a nueve años de prisión contra quien evite el ciclo hidrológico natural en las fases de condensación y precipitación, o utilice, maneje o instale tecnologías que tengan el mismo fin, como cañones antigranizo o vuelos en avioneta en jurisdicción estatal o municipal, son algunas reformas que el grupo parlamentario del PVEM propuso en el Congreso Mexiquense.
La iniciativa de reforma al Código Penal y a la Ley Orgánica de la Administración Pública estatal, dispone que corresponderá a la Secretaría del Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible establecer y ejecutar acciones de control, supervisión, verificación y vigilancia ambientales, así como de prevención y, de ser el caso sancionar a quienes recurran a esas prácticas.
Refiere que el Estado de México cuenta con 759 mil 963 hectáreas dedicadas al campo, sin embargo, se repite la misma situación de desamparo que a nivel federal ha surgido con la problemática por el uso de los cañones antigranizo o los vuelos en avionetas que evitan llueva, que describen campesinos que se ven afectados en sus cosechas por la falta de lluvias.
El documento cita que la Sociedad Protección AntiGranizo (SPAG) argumenta que su sistema respeta el ciclo natural de la nube y no afecta la cantidad de lluvia ni produce variación en la dirección de las nubes.
Mientras que el divulgador de ciencia Mauricio Schwarz no cree que este sistema sea capaz de alterar el ciclo natural y no hay mecanismo para que el sonido afecte la formación de granizo, argumento apoyado por Fernando García García, investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, quien señala es un mito que los cañones antigranizo detengan grandes precipitaciones.
En contraparte, los académicos de las Universidades de Guadalajara y San Luis Potosí, así como del Observatorio de la Tierra de la Nasa, agregan que el vínculo potencial entre el uso del cañón y la disminución de las lluvias se ve agravado por la intensa sequía y generalizada en casi el 85% del país.
Además, existen los testimonios de asociaciones y afectados que exigen la regulación de los sistemas, especialmente en la zona norte, quienes defienden los derechos del agua en un tiempo en donde la escasez del vital líquido está marcando el presente y futuro de la humanidad.
Refiere que, si bien se necesitan estudios sobre la tecnología de cañones antigranizo, se deben considerar alternativas de protección no invasivas o dañinas para terceros, como las mallas antigranizo, invernaderos o túneles de malla que protegen a las plantas del granizo, que son más costosos, pero otorgan protección completa y eficaz.
Por último, precisa que la propuesta se fundamenta en los movimientos de campesinos y ejidatarios cuyas peticiones para ser auxiliados en el uso no regulado de los cañones antigranizo han sido ignoradas, especialmente los de la zona norte de la entidad donde se vive una severa crisis hídrica.
(Foto: Especial Portal)
