Senen Viñas, enviado especial
Venciendo a Jordania 93-80, con un mejor manejo del juego en el ultimo cuarto adelantándose en el marcador, acertando oportunamente los tiros que le permitían mantener una ventaja escueta, pero ventaja al fin y realizando sus últimas con la consabida receta de agotar el tiempo de 20 segundos para tirar atinadamente, el seleccionado nacional vuelve a exhibir el juego al que nos tenia acostumbrados, esperando que esto mejore el ranking que otorga la FIBA al termino de la copa y lo haga llegar con mejores expectativas al preolimpico que otorga lugares para ir a Paris 24.
Y eso que el juego que opuso Jordania no fue nada sencillo, pues se fue alternando con México en el marcador, ambos con escuetas ventajas que hacían rondar el fantasma de la derrota que se sufrió con los jordanos en su país, previo al certamen mundialista, sólo que, al contrario de lo que paso con Egipto, al que había vencido también antes de la copa mundial, ahora Mexico puso en práctica el aprendizaje de su caída y logró contener a Jordania, hasta llevarlo mas maniatado a su terreno de juego.
En en la rueda de prensa posterior, Gabriel Girón, aunque no dejó de expresarse bien de Pako Cruz y Paul Stoll, como los estelares del equipo, remarcó la mejor disposición que al final ya tuvieron los jugadores mexicanos; mientras que Omar Quintero, como entrenador, abundó sobre el privilegio de trabajar sobre un equipo así, y esperando que el actuar de México se mantenga para su inmediato compromiso de asistir a los panamericanos de Chile, con el mejor plantel que se disponga.
En cuanto al otro equipo representante del continente americano, en esta ronda definitoria de los lugares 17 a 32 de la copa mundial, Venezuela volvió a perder, ahora con Finlandia 90-75, dejando una triste marca de su paso por este certamen; algo inexplicable para un país con buenos antecedentes basquetboleros y con variados jugadores estelares del nivel de Carl Herrera, que han llegado a brillar hasta en la NBA.Algo tendrán que hacer allá para retomar el nivel al que tenían acostumbrados a su afición.
(Foto: Senen Viñas)
