Nota
Sólo tengo una certeza de los bancos: están llenos de estructuras narrativas que permiten problematizarlos desde el lenguaje. En algunos poemas mi intención es hacer más inmediato el tema e imaginar una explicación a los procesos invisibles que implican el uso de los bancos desde dispositivos electrónicos. También jugué en la ambigüedad de la palabra “banco”, haciendo alusión a la institución financiera y al diseño de un mueble. Por otro lado, la cercanía que tengo con el tema es por mi mamá, una mujer igual de imponente, neurótica y contradictoria que un banco. Al escribir los poemas y escuchar las propuestas de mis compañerxs en el taller de poesía de Grafógrafxs, fueron más evidentes las semejanzas entre las madres y los bancos, instituciones financieras, administrativas y meticulosas que intimidan con apenas nombrarlas.