Tomás Flores Rosales
• 2022, futuro o debacle de Alfredo Del Mazo Maza
• “Staf” presidencial, idea de López Obrador para el mandatario mexiquense
• Una embajada “dorada”, el estigma nostálgico del aún gobernante
• Escenario sucesorio, dejar la política a los políticos
El que inicia después de este periodo vacacional, será un año preelectoral que marcará el futuro político de Alfredo Del Mazo Maza
Ha comentado el mandatario mexiquense que el referido será un periodo de “consolidación” de 12 meses, aún cuando no se observa obra, proyectó o trabajo que pudiera alcanzar ese estatus.
Pobreza, marginación, violencia y actuación de la delincuencia organizada permanecen casi en los mismos niveles del inicio del sexenio que corre.
El gran proyecto que el gobernador del Estado de México esbozó al inicio de su mandato está prácticamente desahuciado, pues la delincuencia todos los días hace acto de presencia en colonias, delegaciones, municipios y distritos que conforman la geografía mexiquense, no obstante que Del Mazo prometió con denuedo convertir al Estado de México en el “más seguro del país“.
Deseo que difícilmente hará realidad Alfredo Del Mazo y tampoco se visualiza otro rubro en donde el gobernador pueda fundamentar su discurso orientado al año que él llama como de “consolidación“.
Ni siquiera la política del llamado “Salario Rosa” refleja las intenciones positivas que espera Del Mazo, pues parámetros internacionales no le dan el estatus buscado o intentado a dicha especie.
Incluso, la administración Delmacista no resistiría un análisis comparativo estructural sobre los resultados de cuatro años respecto a la aplicación de la estrategia social señalada, pues a cambio de un “Salario Rosa”, decenas de mexiquenses se hunden en las desigualdades sociales, pobreza y marginación.
Por lo que la “consolidación“ a que se refiere el aún gobernador en funciones, debe encontrar nuevas aristas de cortísimo plazo para justificar todo su sexenio.
Es decir:
A.- En 12 meses Del Mazo Maza debe idear nuevas mecánicas de medición pública en atención a la gente, servicios y apoyos sociales medibles, distintos al “Salario Rosa” y de sus respectivos programas colaterales de supuesto respaldo social directo
B.- En ese mismo lapso Del Mazo Maza tendrá que desligarse de tentaciones de tipo político que ya no puede concretar, como lo es su aspiración presidencial.
Y lo mas inteligente que puede hacer, es perfilar a la candidata o candidato a sucederlo.
Es verdad que gobernanza y actividad electoral habrían de separase, pero en este caso sui géneris ya es complicado hacerlo, pues de lo contrario solo habría dos caminos en este año al respecto:
1.- El de dedicarse a urgir proyectos de “relumbrón“, como lo son las plazas cívicas del centro de Toluca , de pasarlas de ser unas planchas de frío concreto a singulares “prados” con árboles no aptos para la zona, o
2.- Concretarse únicamente a guiar, organizar y coordinar el proceso electoral del 2023 , lo cual podría convertirse en un gran error o desacierto, pues Del Mazo no es operador político .
Incluso es de los mandatarios mexiquenses -del tiempo reciente- más apolíticos, que le han dado el calificativo, dentro de los grupos de poder estatales, de un gobernante al que le “aburre la política “.
Por eso , más vale que los 12 meses del 2022 , el mandatario mexiquense los administre a su estilo y capacidades , dejando la política a los políticos, que los hay de sobra en la tierra del mítico “grupo Atlacomulco “.
Luego entonces , tipificar al 2022 desde Lerdo Poniente 300 , como el año de la “consolidación “ , significa o equivale a hacer más de lo mismo , con el último de los presupuestos que en breve aprobarán los legisladores locales y que en su totalidad operará Alfredo Del Mazo Maza , pues el del 2023 lo aplicará , en su último trimestre su sucesor o sucesora, en un esquema que siempre inquieta cuando es llevado a cabo por gobiernos priistas que acostumbran no a “consolidar” obras , sino a no menguar el llamado “año de Hidalgo”.
Así , el 2022 que también debe marcar la adelantada recta final del sexenio de Alfredo Del Mazo Maza , no será un día de campo para el que podría convertirse en el último gobernador priísta mexiquense, pues además de “consolidar” más de lo mismo , posiblemente intentará reservar un espacio para su futuro en el nuevo escenario del sistema político mexicano , lo que lo podría llevar a una embajada “dorada” o bien a un nuevo organismo que se desarrolle como “staf” de la Presidencia de la República, ideado por el mismo Andrés Manuel López Obrador , de quien se dijo en esta columna , tras su rendición de protesta como presidente de la República en 2018 , que podría sumar a Alfredo Del Mazo Maza a la integración de su gabinete, versión alejada de la sensibilidad de pocos reales analistas en el momento preciso, pero que hoy es lo más latente para el futuro de Del Mazo , aún cuando el mexiquense se puede dar la libertad de mejor retirarse del entorno político por un tiempo .
SÍNTESIS POLÍTICA
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), finalmente aceptó la controversia promovida por el Poder Legislativo, relativa al aplazamiento del proceso de Revocación de Mandato que contempla la Constitución Política del país, acordado por el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE), con lo cual el órgano comicial está obligado a mantener las etapas de organización respectivas y será en breve cuando se resuelva lo concerniente a la petición de más presupuesto. Cabe destacar que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, dijo en la “mañanera”, que de no acatar los consejeros electorales su responsabilidad, serán los ciudadanos los que podrían organizarse para tal evento, pero especialistas en la materia han coincidido que no es viable la postura presidencial . Y es que en este contexto, no debería haber mucho problema , pues en harás de las actividades vinculantes del INE con los llamados OPLES, el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) , a decir verdad , tendría toda la capacidad, quizá de sobra, para suplir al organismo que preside Lorenzo Córdova.
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Tal vez poca importancia se le dio al tema de la “firma electrónica“ para los nuevos presidentes municipales que iniciarán actividades en el primer minuto del nuevo año 2022 instrumentada por el Órgano Superior de Fiscalización de la cámara local de diputados , lo cual no debe de ser así , pues es el lugar en donde se pueden evitar y detectar actos de corrupción que caracterizan a las alcaldías y que la titular de dicha dependencia legislativa , Miroslava Carillo , está obligada a dar resultados que no ha alcanzado ni concretado significativamente hasta el momento .
Al respeto la oficina de comunicación social del congreso local , difundió , mediante un boletín de prensa en días pasados que “ el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) llevó a cabo el proceso de enrolamiento de las alcaldías y sindicaturas electas para la implementación de la Firma Electrónica que permitirá la entrega de información vía digital de sus obligaciones periódicas de manera remota; es decir, la presentarán desde sus áreas de trabajo.
Será habilitada con las administraciones municipales que inician su ejercicio en 2022 y entre cuyas obligaciones están la entrega del Presupuesto, Plan de Desarrollo Municipal que contenga los programas de Agenda Digital, Cuenta Pública del año inmediato anterior y los Informes Trimestrales.
Su objetivo será obtener una mayor eficacia, congruencia y transparencia en la información presentada por las entidades fiscalizables, ya que habrá validación de la misma desde el inicio del proceso mediante la carga automática de datos y cruce de información con otros rubros y formatos.
Este nuevo esquema impulsado por el OSFEM, dejará atrás procesos tradicionales relacionados con la entrega del presupuesto, el cual era presencial y con un alto volumen de información física. Asimismo, eliminará la recepción de CD´s sin información o que no se pueden leer, reduciendo en gran medida riesgos de veracidad en firmas autógrafas y documentos firmados que se pueden dañar fácilmente.
El propósito de habilitar la Firma Electrónica es asegurar también, que los documentos firmados son únicos y exclusivos, identificar al firmante de manera inequívoca y asegurar la integridad del documento firmado.
