Miguel García Conejo
“Están todas las pruebas, mi nieta tiene muchas secuelas de lo que le ha pasado”, lamentó Miriam Galicia, abuela que hoy clama justicia para que no se deje libre al victimario de uno de sus nietos.
Recuerda que en enero un sujeto de nombre Luis “G” asesinó a uno de sus nietos y violó a otra pequeña, por estos hechos fue condenado; sin embargo no se dictó sentencia, por lo que podría salir de prisión luego de que su defensa presentó un recurso de apelación.
Con las manos acabadas por lavar ajeno para mantener a sus tres hijos y a su nieta, Miriam hace pausas para relatar la pesadilla que vivió.
“Ha pasado un año de eso, un año en el cual yo no he visto nada, no he visto las promesas que me hizo el presidente Juan Rodolfo, a mi niña no se le ha atendido tampoco”.
Estos hechos ocurrieron el pasado 14 de enero, en un cuarto que rentaba la mamá de los pequeños, ubicado en la colonia San Lorenzo Tepaltitlán, en Toluca, este sujeto agredió sexualmente a la menor.
La familia de la pequeña solicitó la presencia de la policía al percatarse de lo que había sucedido, mientras que Yoshua, el otro pequeño, estaba inconsciente por lo que lo llevaron al hospital General Dr. Nicolás San Juan, donde falleció un día después por las heridas que presentaba.
Luis G fue detenido el 15 de enero y remitido ante un Juez, autoridad que previó proceso legal le impuso esta condena. Como parte de su sentencia, dictada hace cuatro semanas, se le fijaron multas por 88 mil 875 pesos y 93 mil 600 pesos por daño material, pero del dinero tampoco ha visto nada la familia de la menor. Respecto al proceso legal que el sujeto enfrenta por el homicidio de Yoshua,
“No ha sido fácil sobrellevar la vida con mi nieta, mi nieta llora, se para llorando, grita, ella piensa…, piensa que no vamos a tener comida el día de mañana y esconde la comida…”
La exigencia de Miriam no sólo es para la memoria de Yoshua, sino también para su hermanita, que Giovanni no salga de la cárcel y que les llegue apoyo para sobrevivir a la tragedia que los asfixia todos los días.
“Soy abuelita de mi nieta a la que abusaron, golpearon, y abuelita de un niño de cinco años el cual mataron a golpes, lo torutaron hasta que quisieron, hasta matarlo”, sentencia.
(Foto: Miguel García Conejo)
