Miguel García Conejo
En el marco de la pandemia de coronavirus, los sentimientos de solidaridad entre la población se han incrementado con muestras de buena voluntad destacadas entre la sociedad mexiquense; sin embargo, también han aparecido otros que han evidenciado su falta de humanismo y sentimientos. Así lo consideró Francisco Javier Chavolla Ramos arzobispo de Toluca, al denunciar la presencia de personas que se hacen pasar por sacerdotes para aprovecharse de la gente.
De acuerdo con el jerarca católico, la arquidiócesis tiene detectadas es estas personas que buscan aprovecharse de la vulnerabilidad de las familias en esta pandemia, en algunos casos hay necesitados del apoyo emocional y espiritual ante lo cual son presas fáciles.
Calificó a estos personajes como “charlatanes”. En estos hechos han identificado sacerdotes falsos e incluso una persona que se autodenominó obispo y aseguró ya estaba nombrando a sacerdotes y hasta sacerdotisas.
“En primer lugar no son sacerdotes, son charlatanes, con toda la palabra se los digo, porque no tienen nada de sagrado”.
Reprochó la violación no solo de los mantos sagrados de su fe sino la mala fe para violar las normas y burlarse como católicos de lo que creen en busca de unos pesos. Indicó que extorsionar y engañar a la gente es un pecado por el que en su momento deberán responder. En este sentido, llamó a las familias a no dejarse engañar y buscar siempre a los sacerdotes de sus comunidades.
Lamentó que pese a la serie de medidas que ha tomado la Arquidiócesis de Toluca ante la aparición de estos falsos el fenómeno sigue presentándose en distintas regiones de este valle, por lo que pidió a la comunidad denunciar para que o se sigan violando sus santos sacramentos.
(Foto: de archivo, Miguel García Conejo)
