A una semana del desgajamiento del cerro del Chiquihuite, en el municipio de Tlalnepantla, las labores de búsqueda de Paola y su pequeño hijo Dilan de cinco años continúan en la llamada zona cero, al momento solo 80 de las más de 100 familias que deben ser desalojadas han aceptado salir de sus casas.
Miguel García Conejo
Esta labor continúa cuando el gobierno municipal de Tlalnepantla sostuvo que advirtió hace siete años que la ladera del cerro de Chiquihuite, donde se ubica la colonia Lázaro Cárdenas, era una zona de riesgo catalogada como “roja”, de acuerdo con un documento elaborado por la autoridad municipal.
Desde entonces se sugirió hacer estudios para reubicar todas las viviendas; sin embargo nadie hizo nada. A ello se suma la denuncia de vecinos sobre movimientos y escurrimientos de agua en el cerro.
Al momento, la coordinación general de protección civil y gestión integral del riesgo del Estado de México informó que hasta este viernes se han colocado 300 toneladas de arena en costales sobre la Calle Alacranes, como parte de los trabajos para estabilizar las rocas desprendidas del cerro del Chiquihuite, en la colonia Lázaro Cárdenas, segunda sección, pese a ello se advierte que la inestabilidad del terreno se mantiene con riesgos de nuevos deslaves.
En estas acciones de rescate los cuerpos de seguridad se han hecho presentes, principalmente aquellos capacitados en la localización de personas, entre ellos binomios hombre canino en los que han participado 37 canes.
Este rescate, reconocen, ha sido complicado y frustrante tanto por el riesgo como por el poco éxito que han tenido en poder sacar a personas con vida de los escombros.
Este viernes en la casa de la cultura de la colonia Lázaro Cárdenas inició una mesa de diálogo entre vecinos afectados por el deslave y las autoridades, ahí, se dice, recibirán asesoría individual en cada caso, con el compromiso de las autoridades estatales y municipales de brindar una respuesta sobre el futuro de sus casas colapsadas. Al respecto el alcalde de Tlalnepantla Raciel Pérez pidió paciencia a los afectados ante la magnitud de la contingencia que viven.
(Foto: archivo)
