Alfonso Godínez Mendiola
Vaya desánimo entre gran parte de la militancia la que causó la lista de precandidatos del PRI a diputados federales, pues tanto entre priístas como en algunos acertados analistas políticos, el común denominador en la opinión fue: “Los mismos de siempre” (con escasas excepciones) y la inclusión (imposición, diríamos nosotros) de los “júniors” (“lelos” les decimos acá, porque no tienen más mérito ni mucho menos talento alguno que ser hijos de papi o tener otra clase de parentesco con los empoderados “mismos de siempre”). Pero los “pior” de dicho desánimo de esa militancia que nunca elige a sus dirigentes ni mucho menos a sus candidatos (cómo sí ha sucedido en otros estados y para la misma presidencia del CEN como con Don Roberto Madrazo Pintado, Beatriz Paredes y ahora Alito, únicos que no llegaron por dedazo sino por el voto militante) es que el mensaje con ese pésimo listado es que así vendría la designación en las listas para las diputaciones locales y, el proceso que más le interesa y atañe a los militantes, que es el de los miembros de los ayuntamientos, en los que se eligen presidentes municipales, síndicos y regidores, éstos dos últimos serán en menor número gracias a su reducción que impuso el congreso local a iniciativa del Senador Higinio Martínez Miranda. Incluso, nos comentan nuestros ex compañeros que temen que de darse también la alianza con la derecha azul y lo que alguna vez fue el gran partido de izquierda, en lo referente a los ayuntamientos, es que se les tenga que ceder candidaturas para síndicos y regidores en municipios donde prácticamente no existen, pues de por si son pocos espacios los que les quedarán por esa pésima reforma de la “Ley Higinio” como para tener que ceder más todavía. Pero volviendo al tema de los designados por Montiel y por el juniorato, tal y como lo advertimos en este espacio no desde hace días ni meses, sino de años, es que efectivamente, vuelven a imponer no solo a “los mismos de siempre” y a los “júniors lelos” sino que además, de éstos, vuelven a ir los que perdieron contundentemente en 2018, como la júnior Olga Esquivel que perdió en el distrito local 36 ante Javier González Zepeda, quien ganó por PT pero traicionó y se pasó de la izquierda a la derecha, con el PAN, pues; o Telésforo García, dela desprestigiada Antorcha Campesina y quien en 2018 perdió la diputación local en el distrito 3 de Chimalhuacán, ante el morenista Emiliano Aguirre Cruz o Nayely Gutiérrez Ramírez, que hace dos años perdió en el distrito 21 de Ecatepec ante Faustino De la Cruz Pérez, de Morena, y mismo caso para Jorge Hernández Hernández que fue derrotado en distrito 22 de Ecapetec por Camilo Murillo Zavala, obviamente también de Morena. Y así podemos seguir con más ejemplos. En conclusión, a las dos frases que definen muy bien a esta lista, que son “Los mismos de siempre” y los “júniors lelos” habría que añadir una tercera, que es “perdedores”. Reiteramos que no es el caso de todos. La pregunta obligada es, o, mejor dicho, las preguntas son: ¿a cuantos más fracasados o derrotados del 2018 van imponer para las listas que faltan? ¿cómo contar con el apoyo, ya no digamos de la ciudadanía, sino, en primer término, de los propios militantes priístas a los que en algunos municipios son ignorados y ninguneados por los presidentes de los comités municipales, los delegados municipal y distrital y por los coordinadores regionales? Insistimos que no es una situación generalizada en todo el territorio mexiquense, pero ¿les van a llamar para decirles que ahora sí los quieren ver para que apoyen a los nuevamente beneficiados por el dedazo? ¿Tienen alguna estrategia para tratar de retener a los militantes que continúan emigrando a otros partidos desde hace tiempo y que en este espacio hemos señalado permanentemente o repetirán la “brillante” respuesta de “que se vayan” como hace dos años? La oposición se nutre de los ex priístas que no se fueron de su partido por “indisciplina” o “ingratitud” sino porque fueron ignorados y se les impusieron candidatos impopulares, tan impopulares que por eso perdieron quedando la mayoría de esos perdedores en tercera posición, y en muchos casos, precisamente ante ex priístas. Con tanta soberbia, nunca entendieron que no entienden. Y a partir de la noche del próximo 6 de junio, veremos si volvimos a tener razón… #YoNoVotoPorLosMismosDeSiempre y #YoNoVotoPorUnJunior (obvio no voy a votar por Ignacio Rubí Salazar) … Qué tengan un excelente “ombligo” de semana, raza…
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