Por Lizeth Salazar
amar era el verbo
tlazohtla oca ni tlachihualiztli
de nuestro colibrí
xochitlahcoyohuac ihuan xochitlacahtli
flor de media noche y medio día
polen en pico
aleteo en polen
huitzil
-Karloz Atl
Hablar de poesía es entablar una conversación con la íntima esencia del ser y de lo que le rodea, pero al mismo tiempo es encontrar un pedazo del tiempo y transformarlo en una imagen narrativa que cuente un suspiro a los ojos de la vida. El poeta náhuatl mestizo: Karloz Atl revive sus raíces en cada verso, contando la historia ancestral, habla del pasado superponiéndolo en el presente.
Es tataranieto y bisnieto de llamadores de lluvia del cerro Teotzin en San Andrés Tepexoxuca Jalacingo, Puebla. Y nieto e hijo de migrantes nahuas, fundadores del Pedregal de Santo Domingo, Coyoacán (1971). Su florecimiento poético ha traído consigo distintos reconocimientos como es el Premio Interamericano de Poesía Navachiste (2019) por su poemario místico “Espina”, asimismo se ha visto envuelto en la gestoría cultural es el Director del Centro Transdisciplinario Poesía y Trayecto A.C, también el fundador del Circuito Nacional Poetry Slam MX, y miembro de la Asociación de Escritores de México. Su preparación y encuentro con la poesía conlleva pasión por reescribir su percepción del mundo:
“Poesía es vida. Es un arte que se desarrolla en todos los ámbitos de la existencia, tiene que ver con el lenguaje, con la forma de utilizarlo. También importa la energía al mencionar las cosas o materializar los pensamientos y los sentimientos. Es decir: en volver externo para el mundo lo que habita dentro de uno”.
La propuesta artística de Karloz Atl enardece los simbolismos de la cultura mestiza e indígena mexicana, proponiendo un tejido paralelo que a manera de ritual se recita mediante su voz áspera para nombrar lo que por mucho tiempo fue arrinconado “Me di cuenta que requería hablar de temas que nos atañerían comúnmente, con un lenguaje que nombrara el campo conceptual de mis raíces, particularmente mi genealogía, y darles lugar de poder en el verso”, las palabras que Atl utiliza en sus obras son recurrentes en el día a día, pero en pocas ocasiones son vistas desde un punto artístico, el poeta da una re significancia a estas para visualizar todo el misticismo que tienen.
La poesía bilingüe —español y náhuatl— de Karloz tiene como fin plasmar su origen, pero también busca el encuentro y aceptación con la historia. Pues con el paso del tiempo las lenguas indígenas se han ido perdiendo por diversas causas, un factor predominante es la migración y adaptación a la sociedad citadina, la familia del poeta fue arrastrada por esta circunstancia, los últimos en portar el náhuatl como lengua materna fueron sus abuelos, Atl narra que su madre tuvo que enfrentarse a la travesía del desplazamiento y con ello la adecuación de una nueva lengua materna en su familia: el español.
Karloz nació en medio de una urbe, los árboles que habitaban en su entorno fueron sustituidos por los rascacielos de la Ciudad de México, pero en su corazón latía una necesidad de conocer su origen y con ello la lengua que para él entonces era ajena. Su formación en el náhuatl se vio participe de la instrucción docente, pero a través de esta se percató de una cosmovisión de la cual era parte y no lo sabía. La descendencia indígena prevalece entre las sociedad citadina, pues la migración también provoca una movilización de los usos, costumbres e ideologías y con ellos una transculturación. El hecho de que prevalezcan los simbolismos indígenas y mestizos en la poesía de Karloz Atl implica una postura política ante el arte:
“Para mi es importante politizar el hecho de que seguimos siendo indígenas (me auto escribo como indígena urbano) aunque no haya heredado la lengua, ni el territorio”.
La resiliencia por continuar con la vigencia de las tradiciones de los pueblos originarios se expresa en la tinta de Karloz Atl, a pesar de que tenga modos de vida distintos a los de sus abuelos, las raíces de las cuales es originario rasga los limitantes que se puedan encontrar en el camino, pues para él hablar de ambos planos: lo indígena y lo citadino, no representa una confrontación de posturas e ideologías, más bien una interculturalidad que se entrelaza: “Seamos quienes seamos, debemos darnos cuenta de lo que nos ha antecedido, pero también de lo que nosotros queremos dar. Todo tiene que ver con reconocerse”.
La historia del pueblo mexicano ha dejado un panorama rico en cultura que se manifiesta con fuerza en cada una de nuestras expresiones. Nombrar mediante versos lo que con el paso del tiempo se ha ido empolvando es avivar el rescoldo del origen de uno mismo. La obra poética de Karloz Atl manifiesta el mestizaje mediante la palabra náhuatl: in xóchitl in cuícatl —flor y canto—. Y por medio de estos cantos enuncia un indigenismo urbano, el cual resiste junto con sus raíces. Las obras y presentaciones del poeta las postea en sus redes sociales, se encuentra en Facebook, Instagram y Twitter como: @KarlozAtl.
(Foto: Brenda Santos de la C.)
