En territorio mexicano, más de 15 mil yaquis fueron asesinados por el despojo de sus tierras, los sobrevivientes fueron deportados al sureste del país para trabajar como esclavos en las haciendas.
Ximena Barragán
Desde el Porfiriato, y hasta ahora, a excepción de la gestión del General Lázaro Cárdenas, ha prevalecido la noción de que “lo más importante es el progreso, aunque no haya justicia”, pero la actual administración piensa diferente. “Sostenemos que el progreso sin justicia es retroceso”, aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Por ello, este jueves, el primer mandatario se reunió con representantes del pueblo Yaqui en la sede de la Guardia Tradicional en Vícam, Sonora, en donde firmó un documento, “Plan de Justicia del Pueblo Yaqui”, en un acto de justicia histórica para su sus integrantes, adquiriendo tres compromisos principales:
1- Replanteo de la resolución del presidente Cárdenas y restitución de la tierra y el agua
2- Plan integral de bienestar (fomentar la producción con sus recursos, acceso íntegro a todos servicios para los 8 pueblos)
3- Atender las demandas, promover el diálogo y llegar a acuerdos en torno al gasoducto
Para garantizar el cumplimiento de estos puntos, se creará una Comisión de Justicia para los Pueblos Yaquis; “no queremos que quede solo en palabras o papeles, queremos que se convierta en hechos, en realidades”
La comisión será integrada por funcionarios y presidida por el mismo, con la suplencia de Adelfo Regino, titular del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), y contará con una oficina en territorio Yaqui.
(Foto: presidencia)
