Durante muchos años el sur y sureste del país fueron abandonados por las administraciones federales, generando un crecimiento económico disparejo; superior en las regiones del norte, bajío y centro.
Ximena Barragán
A decir del presidente Andrés Manuel López Obrador, el apoyo otorgado a las regiones señaladas fue financiado precisamente por el sur y sureste, costeando rescates a empresas y bancos con recursos obtenidos del petróleo extraído en estas zonas.
Así, la actual administración, ha trabajado por el equilibrio, en un desarrollo horizontal y equitativo, mediante la inversión federal al sur y sureste, regiones que además registran la mayor cantidad de pobreza “se vive la paradoja, la contradicción, que es una región rica con pueblo pobre”
Por lo anterior, el gobierno presidido por AMLO trabaja en los proyectos de rehabilitación de dos refinerías (Minatitlán y Salina Cruz), la ampliación de la carretera del istmo a Acayucan, la construcción de la carretera de Oaxaca al istmo; la ampliación del puerto de Salina Cruz y la construcción de un nuevo puerto petrolero y mercante (también en Salina Cruz), cuya licitación se llevó a cabo este fin de semana.
A la par, se está trabajando en la rehabilitación del Ferrocarril del Istmo, el establecimiento de 10 parques industriales, en los que promoverá la inversión privada mediante la reducción de impuestos.
En el marco de la Supervisión de la Autopista Barranca Larga-Ventanilla, el presidente anunció una inversión de 5 mil millones de pesos para el desarrollo urbano de 10 municipios de la franja del istmo.
Con lo anterior, y otras acciones, como la entrega de crédito y microcréditos a pequeñas empresas y trabajadores informales, recordó AMLO, se materializa el cambio de estrategia en política económica. “Ahora es de abajo hacia arriba, y ahí vamos, ya hay buenos indicadores para decir que se va a cumplir nuestro pronóstico de recuperación en ‘V’“.
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