¿Quién Entenderá Ritmo al que Quiere Caminar, Correr y Volar la Juventud?
Justo cuando juventud cuenta con decisión, preparación, conocimiento, tecnología y entusiasmo para abrirse al mundo y caminar, correr, volar y competir en las empresas e instituciones globales, es que el gobierno federal camina en sentido contrario para volver a una economía cerrada, estatista y proteccionista.
En la genética juvenil hay rebeldía, competencia, esfuerzo, tenacidad y deseo de progreso en base al conocimiento adquirido y al compromiso de actualización permanente para evitar el rezago en un mundo dinámico y cambiante donde todas las naciones interactúan en cadenas productivas de bienes y servicios.
El anhelo de la juventud es poder elegir libremente la carrera universitaria y el plantel educativo de su preferencia; contar con maestros de excelencia, instalaciones, materiales, laboratorios de idiomas y prácticas profesionales de primer mundo.
Sueñan con mantener una línea permanente de intercambio de experiencias dentro y fuera de su país, con las universidades de mayor prestigio en las diferentes especialidades en las que se preparan para su vida profesional.
En la medida en que México se fue incorporando a los esquemas de globalización, las universidades públicas y privadas del país entraron a una sana competencia de excelencia académica, así fueron ganando posiciones de honor en el ranking de las mejores universidades en América Latina y en el mundo.
Actualmente el panorama para la educación superior mexicana no es muy alentador: las universidades públicas están sufriendo severos recortes presupuestales en las áreas del conocimiento, la ciencia, la tecnología, la investigación y la docencia.
Las universidades privadas resentirán irremediablemente los efectos de la severa crisis económica que afectará a las familias mexicanas.
Más que dádivas económicas del poder público, la juventud demanda educación de excelencia para caminar, correr y volar por el mundo al concluir su clico estudiantil. Pero hoy, el gobierno federal y la juventud van en sentidos opuestos.
*Licenciado y Maestro en Periodismo
Twitter: @luciorm
