Como en otros sectores, la participación de las mujeres en el servicio público mexiquense comenzó en cargos “socialmente aceptados”; desde afanadoras de limpieza hasta secretarias y asistentes.
Ximena Barragán
Fue gracias a la lucha de mujeres determinadas y dispuestas a desafiar estereotipos que la injerencia femenina pudo ascender de rango. Tal es el caso de Juana Benigna Contreras Vergara.
La “Lic. Juanita” , como la recuerdan sus colegas con cariño, inició su carrera en el, entonces, Registro Público de la Propiedad, en 1979, cuando ingresó como auxiliar de registrador.
Para 1983, y con solo 24 años de edad se convirtió en registradora de la propiedad y comercio en el Distrito Judicial de Toluca y para 1990 ya ocupaba el cargo de Jefa del Departamento de Asistencia Técnica de la Dirección General.
A lo largo de su carrera, la comprometida abogada, se distinguió por compartir sus conocimientos, ambiciones y oportunidades con otras mujeres, como Patricia Díaz Rangel, hoy Directora Jurídica y Tania Lugo Paz Directora General del Instituto de la Función Registral del Estado de México (IFREM) ; quienes la recuerdan con cariño y admiración.
“Divertida, inquieta, amiguera, creativa , elocuente , aficionada al cine y amante de la lectura, magnifica estudiante …. Pero destaca, sobre todo, su lado humano, su característico y autentico interés por ayudar a los demás”, recordó Lugo Paz.
En el marco de las celebraciones por el Día Internacional de la Mujer, la capitalina de nacimiento, pero mexiquense de corazón y de competitivas ambiciones, que falleciera en 2007, fue homenajeada con el nombramiento del Auditorio del IFREM en su honor.
Como un reconocimiento a la labor de Juanita en los cimientos de la dependencia mxiquense, se llevó a cabo una ceremonia de develación de placa, a la que asistieron sus hijas Adjara Joanna y Ariana, y su esposo Jorge Estrada Sandoval.
(Foto: Ximena Barragán)
